lunes, 29 de julio de 2013

DIFERENTES USOS DE LAS LÁMINAS

Las láminas:
Las láminas hechas a base de fotografías reales o en dibujos pueden ser muy útiles para el desarrollo de la atención y del lenguaje en el niño. Así podemos crearle mucha utilidad a las láminas en beneficio del aprendizaje de nuestros hijos, solo basta darle una utilidad diferente al que solemos hacerlo como simplemente ilustrar un tema escolar.

Para trabajar la Atención:
Dependiendo de la edad de nuestros hijos podemos mostrarle la lámina por el tiempo de un minuto y luego retirarla de su vista para después pedirle que nos diga que dibujos recuerda haber visto.

Si se tratase de un niño mas grande podemos mostrarle la lámina y pedirle que nos mencione con más detalle las características de los dibujos que ha observado como por ejemplo de que color está vestido el niño, cuántos animales habían sobre el árbol, etc.




Para trabajar el Lenguaje:
Aquí podemos mostrar al niño la lámina y pedirle simplemente que mencione el nombre de los objetos que observa. Los elementos que no conozca podemos mencionárselos así incrementaremos su vocabulario
.
La siguiente alternativa sería pedirle que nos narre una pequeña historia acerca de lo que está viendo en la lámina. De esa manera también trabajamos su habilidad creativa.

Una tercera alternativa sería como en el caso de esta lámina mencionar que de raro o curioso hay en el dibujo, por ejemplo el tiburón que está en la orilla del mar y que los bañistas están tranquilos, etc.





DIFERENTES USOS DE LAS LÁMINAS









DIFICULTADES DEL LENGUAJE





jueves, 25 de julio de 2013

ESTIMULACIÓN TEMPRANA: 4º MES

El bebé de 4 meses. Características.
En esta etapa el movimiento constituye una de las características más importantes ya que se constituye como una de las necesidades psicológicas básicas del niño. Es a través del control de sus movimientos como ejerce la capacidad de realizar actividades más complejas. El bebé disfruta de un buen control sobre los movimientos de la cabeza.
Consigue un gran progreso en cuanto al movimiento de brazos  y manos, la manipulación tiene gran importancia para el desarrollo del juego y del pensamiento. Comienza a conocer y distinguir los objetos, forma, posición y distancia.
Su capacidad visual está a punto de desarrollarse plenamente y puede ver casi todo lo que hay en su habitación.
En cuanto a sus habilidades sociales, éstas han aumentado y se encuentra especialmente  dispuesto a ser “amigo” de todos.  Llora poco y muestra interés por las cosas, las personas y los acontecimientos.
Es el tiempo de forzar muchos hábitos.
Sus sentidos están más desarrollados y logra mayor armonía entre ellos. La boca sigue siendo uno de los medios más importantes de conocimiento y aprendizaje de los objetos.



Estimulación Motriz.
  • Cuando el bebé esté boca abajo, agítale objetos de un lado a otro, de arriba abajo para que eche la cabeza hacia atrás y los siga.
  • En posición boca arriba, tómalo de las manos y trata de levantarlo quince o veinte centímetros.
  • Si el bebé no alza las piernas espontáneamente, coloca una manta doblada tras su espalda y levántale las piernas cada vez más alto.
  • Toma al bebé por el pecho en posición vertical. Bájalo hasta que la punta de sus pies toquen el piso. Haz cinco movimientos  rápidos hacia adelante y cinco hacia atrás.
  • Cuando el bebé esté boca arriba ayúdale a voltearse empujándolo por la cadera.
  • Cuando el bebé esté en posición boca abajo, retírale a una corta distancia el objeto con el que está jugando y déjalo hacer un esfuerzo inclinándose hacia adelante y empujándose con los pies para alcanzarlos.

Estimulación Cognoscitiva.
  • Escóndete y haz tintinear un vaso. Cuando el bebé voltee hacia donde se produce el sonido, extiende tu mano con un juguete interesante para el bebé y muévelo. Haz esto mismo pero con otro sonido, pero esta vez cuando el bebé  voltee no le muestres nada que lo estimule. Repite estos ejercicios varias veces al día.
  • Háblale con tono de voz cariñoso, severo, cansado, alegre, según la ocasión lo amerite.
  • Empieza a moverte hacia el bebé desde el otro extremo de la habitación y ve acercándote con un juguete en tu mano extendida hacia él. Eventualmente el bebé recibirá el objeto estirando su propia mano.
  • Muéstrale las prendas de vestir antes de ponértelas, las flores antes de olerlas, las joyas antes de usarlas. Háblale siempre acerca de lo que estás haciendo.

Estimulación del Lenguaje.
  • Recítale al bebé pequeños versos.
  • Refuerza repitiendo constantemente cualquier sonido verbal que se asemeje al lenguaje español.
  • Háblale en tono de voz alta para que el bebé aprenda a emitir sonidos parecidos a los tuyos.

Estimulación Visual.
  • Ponle objetos que le parezcan llamativos, seleccionándolos de tal forma que tengan colores brillantes y relucientes. Déjalos caer y llama su atención para que mire el lugar donde quedaron.
  • Esconde bajo su cobija una punta de su juguete preferido. Pregúntale ¿dónde está el gato? Luego muéstrale diciendo “aquí está el gato”. Hazlo de la misma manera cubriéndote los ojos con las manos. Dile “aquí estoy”.
  • Háblale al bebé a medida que te vas alejando, sigue hablando aun cuando no te vea, aparece de nuevo u continúa hablándole. Verá que el sonido se mantiene aunque no esté presente quien lo emite.

Estimulación Olfativa.
  • Continúa incrementando el número de aromas y olores. La estimulación de este sentido ayuda al enriquecimiento del área cognoscitiva, ya que aprenderá a reconocer las cosas por sus olores y a anticipar sus acciones ante éstas.

Estimulación Auditiva.
  • Cuando el bebé esté boca abajo, sacude un sonajero por detrás de la cabeza, intentará mirar hacia atrás en busca del sonido. Hazlo nuevamente pero hacia la derecha, tratará de hacer girar su cuerpo empujando con sus piernas y brazos. Repítelo sobre el lado izquierdo.
  • Dale para que juegue libremente, objetos que emitan sonidos, como cascabeles, cajas de música, animales de cuerda, tarros llenos de piedra, etc.
  • Coloca una grabación con canciones infantiles mientras estás haciendo algunas actividades con el bebé.

Estimulación Táctil.
  • Acuesta al bebé en el piso con varios pedazos de telas de diferentes texturas. Deja que el bebé juegue libremente con ellas, las toque, las lleve a la  boca, etc.
  • Hazle caricias o masajes con objetos tales como espuma, plumas, esponjas, toallas, cintas.
  • Ponlo a jugar en una bañera. Llénala unas veces con agua, otras con cereales, con cubos de espuma, arena, etc.

Estimulación Socio afectiva.
  • Coloca al niño frente al espejo y dile: “Aquí está Andrés, ese es el bebé, este eres tú”. Hazlo diariamente.
  • Haz que otras personas lo llamen por su nombre.
  • Colócate frente al bebé y cúbrete la cara con una tela. Apenas el bebé murmure, destápate y deja que te vea, sonríele y contesta su murmullo. Hazlo de nuevo después. Pronto entenderá el principio del juego y comenzará a llamarte para que aparezcas.
  • Provoca en el niño la risa a través de gestos, cosquillas y juegos vocales.
  • Háblale sobre cada una de las actividades de aseo, por ejemplo: voy a bañarte para que estés limpio, te lavo las manos, etc.

ESTIMULACIÓN TEMPRANA: 4º MES














martes, 16 de julio de 2013

¿QUÉ SON LOS REFLEJOS?

Un reflejo es una respuesta automática, involuntaria y probablemente defensiva que el individuo da ante una supuesta agresión (como cerrar los párpados cuando algo viene hacia nuestros ojos). Cuando esta respuesta está mediada por el pensamiento se convierte en un acto voluntario y deja de ser un reflejo.
La mayoría de las reacciones del recién nacido son respuestas primitivas, han quedado grabadas en nuestros genes y se manifiestan precisamente cuando el ser humano aún no se ha completado neurológicamente: en el momento de nacer.
La existencia de los reflejos es un indicador de vitalidad y de que el sistema nervioso del recién nacido funciona bien. Tan importante como observar que están presentes al nacer es comprobar que van desapareciendo con el tiempo (la mayoría, durante los primeros meses de vida). Eso es señal de que el bebé está evolucionando correctamente.

Estos son los Reflejos que se presentan en el bebé:
1. De arrastre
Cuando se pone al bebé sobre su barriga, mueve las piernas como si quisiera avanzar arrastrándose.
Cuánto dura: Desde los primeros días hasta los tres meses.
Por qué lo hace: Con este reflejo el bebé ensaya los movimientos que más tarde necesitará para gatear. Pero lo cierto es que, desde los tres meses hasta que empieza el gateo, el niño no vuelve a realizar movimientos de este tipo.




2. De succión
Si se le coloca en la boca el pezón, o incluso un dedo, lo chupa enérgicamente.
Cuánto dura: Está presente desde el nacimiento, hacia el tercer mes se intensifica y en torno al sexto desaparece. A partir de entonces la succión se convierte en un acto voluntario.
Por qué lo hace: Mediante la succión, el recién nacido consigue el alimento que necesita.



3. De prensión palmar
Cuando algo roza la palma de su mano, el recién nacido lo agarra con fuerza.
Cuánto dura: Desde que nace hasta los cinco o seis meses.
Por qué lo hace: Es un reflejo que permite al bebé agarrarse y sujetarse, no lo hace de forma voluntaria. Por otro lado, se cree que puede favorecer el vínculo entre padres e hijos (el pequeño agarra con fuerza el dedo que estos le ofrecen).





4. De búsqueda
Si se le roza la mejilla o la comisura de los labios con los dedos o el pecho, instintivamente el bebé gira su cabeza en esa dirección en busca de comida.
Cuánto dura: Desde el primer día de vida hasta los cuatro meses. A partir de entonces, el bebé se vuelve automáticamente hacia el pecho porque ya reconoce su tacto y olor.
Por qué lo hace: Es un reflejo de supervivencia, su instinto le guía hacia donde está el pezón para alimentarse.




5. Reflejo de moro
Si está sentado y se le deja caer hacia atrás de repente, el bebé abre los brazos. Luego los tiende hacia delante como si fuera a dar un abrazo y rompe a llorar con fuerza.
Cuánto dura: Hasta el cuarto mes.
Por qué lo hace: Reacciona como si le hubieran dado un susto, por lo que seguramente responde a un instinto de protección.




6. De prensión plantar
Al sentir un roce o presión en la planta del pie, el bebé flexiona los deditos hacia dentro.
Cuánto dura: Desde que nace hasta los nueve o doce meses.




7. Reflejo tónico del cuello
Si cuando está tumbado giramos su cabecita hacia un lado, él inmediatamente estira el brazo de ese lado y dobla el contrario. También se llama "reflejo del espadachín" por la curiosa postura que adopta.
Cuánto dura: Desaparece hacia el tercer mes.
Por qué lo hace: Algunas teorías dicen que facilita y desarrolla la fijación visual del bebé, al poder observar su mano, y la toma de conciencia de su propio cuerpo.




8. De enderezamiento
Cuando se sostiene al recién nacido cogiéndole por las axilas y haciendo que pose los pies en una superficie dura, de repente estira las piernas y el tronco, y levanta la cabeza.
Cuánto dura: Se manifiesta al nacer y desaparece hacia el tercer mes.


9. De la marcha
Si alguien le sujeta por las axilas y le hace apoyar un pie sobre una superficie dura, el pequeño reacciona levantando el otro pie como si quisiera echar a andar, e incluso se puede ver cómo da unos pasitos.
Cuánto dura: Hasta el segundo mes.
Por qué lo hace: Aunque con este reflejo el bebé demuestra que es capaz de mover las piernas alternativamente, no parece que tenga nada que ver con su futura capacidad para caminar.